Es bueno ver que se avanza en la profundización de la asociación comercial y de inversión entre África y el Caribe. De hecho, hace poco, el Banco Africano de Exportación e Importación anunció que abriría una oficina en Barbados y que se había comprometido a aportar 1.500 millones de dólares para ayudar a impulsar una asociación comercial con el Caribe. Esta iniciativa se produce tras el Foro de Comercio e Inversión AfriCaribe que tuvo lugar el pasado mes de septiembre en el Caribe. Debemos mantener este impulso, pues ya es hora de que aprovechemos nuestra inextricable y profundamente entrelazada historia y nuestros lazos con África en beneficio tanto de los pueblos de África como del Caribe.
Sin embargo, para lograr avances concretos hay que trabajar mucho. Según el Trade Map del Centro de Comercio Internacional (CCI), en 2021, las exportaciones africanas a los países de la CARICOM y la República Dominicana representaron apenas el 0,001% de las exportaciones totales de África. Para nosotros en la Región, nuestras exportaciones, en porcentaje del total, sólo el 1,4% van a África, siendo los productos petrolíferos el principal comercio entre CARICOM y África Occidental, en particular con Gabón y Ghana. . En esencia, el limitado comercio que mantenemos con África está dominado por unos pocos productos y un reducido número de países. La cuestión que se plantea es cómo llevar nuestras relaciones comerciales y de inversión con África al siguiente nivel, aprovechando nuestros excelentes lazos interpersonales, históricos y culturales, dadas las pautas y el volumen de comercio existentes.
Para empezar, al redefinir esta relación, el Caribe debe tener un enfoque forense. En primer lugar, debemos reconocer que África no es un monolito. En este vasto continente hay 54 países con grandes diferencias en cuanto a regiones y subregiones. Sólo en términos lingüísticos, y además de la multiplicidad de variantes locales, nacionales y regionales, grandes franjas de África hablan inglés, francés y portugués. En un país como Tanzania, donde presté servicio y viví en mi primera estancia en el continente, hay más de 120 grupos étnicos y dialectos. Nigeria, el país más grande del continente, es aún más complejo, al igual que Sudáfrica, una de las veinte economías más ricas del planeta. Por lo tanto, para nosotros en el Caribe, como pequeña región que trata con un vasto continente, es importante reconocer que, aunque políticamente queremos una mayor relación con África, en el frente económico necesitamos centrarnos en menos países en primer lugar.
En segundo lugar, deberíamos empezar por donde están nuestros puntos fuertes, tenemos que construir sobre los cimientos existentes que tenemos en África Occidental. Algunas empresas, como Republic Bank Ltd, tienen una presencia bien establecida. Del mismo modo, en el ámbito de la tecnología financiera, se formó una asociación entre Barbados Global Integrated FinTech Solutions (GIFTS), iPay Anywhere (iPay) y TelNet, una empresa nigeriana de transformación digital, que en última instancia dará acceso a 200 millones de clientes a través de la base de datos de TelNet. Por otro lado, GIFTS se ha asociado con la empresa de tecnología financiera Zeepay, con sede en Ghana, para ofrecer a los barbadenses Zeemoney, el monedero móvil que permite a los usuarios transferir fondos a otros usuarios de la plataforma Zeemoney. Este es el ejemplo perfecto de las oportunidades recíprocas que existen entre las dos regiones y del beneficio de un enfoque claro reforzado por acciones concretas. El éxito engendra éxito y sienta las bases más sólidas para una asociación en expansión.
En tercer lugar, tenemos que pasar de un enfoque tradicional de la diplomacia basado en la representación a otro de carácter comercial, que aproveche las relaciones diplomáticas existentes y cree otras nuevas. Algunos países del Caribe ya han iniciado este camino. Sin embargo, no puede ser individual y ad hoc, sino que debe formar parte de un enfoque coherente y sistemático de la diplomacia comercial. En relación con esto está el establecimiento de relaciones con países de África afines a nuestro tamaño y que compartan preocupaciones comunes en cuestiones como la vulnerabilidad climática y la necesidad de financiación en condiciones favorables. Los países insulares y los pequeños Estados del continente, como Seychelles, Mauricio, Botsuana, Sierra Leona y Namibia, serán nuestros aliados y defensores naturales en el santuario de la toma de decisiones africana, en la Unión Africana y en otros lugares.
De cara al futuro tenemos la opción de seguir como hasta ahora y proceder de forma gradual, con lo que perderemos otra oportunidad. Alternativamente, podemos impulsar un programa de transformación que restablezca y reconfigure la relación comercial y de inversión con África. Después de haber vivido, servido y viajado mucho por África, he visto de primera mano las enormes oportunidades que se nos presentan en esta época de África Naciente. Para llevar nuestra relación al siguiente nivel, necesitamos un enfoque sostenido para aprovechar las relaciones existentes y forjar asociaciones clave en el continente.
Deodat Maharaj is the Executive Director of the Caribbean Export Development Agency and can be reached at: [email protected]